Incluso los niños muy pequeños sienten el dolor de una pérdida, pero aprenden a expresar el dolor al observar a los adultos que les rodean. Tras una pérdida, especialmente la de un hermano o uno de los padres, los niños necesitan apoyo, estabilidad y honestidad. También podrían necesitar que les reafirmen aún más que los cuidarán y los mantendrán seguros. Como adulto, usted puede apoyar a los niños en su proceso de duelo al demostrarles que está bien estar tristes y ayudarles a asimilar la pérdida.
Responda a todas las preguntas del niño con la mayor sinceridad posible. Utilice términos muy sencillos, honestos y concretos cuando explique la muerte a un niño. Los niños, sobre todo los más pequeños, pueden culparse por lo ocurrido y la verdad les ayuda a ver que no tienen la culpa.
Una comunicación abierta facilitará que el niño exprese sus sentimientos de angustia. Debido a que los niños suelen expresarse a través de cuentos, juegos y obras de arte, fomente esta autoexpresión y busque en estas actividades indicios de cómo están sobrellevando la situación.
Cómo ayudar a un niño en duelo
Haga lo siguiente:
Permita que su hijo, aunque sea pequeño, asista al funeral si lo desea.
Transmita sus valores espirituales sobre la vida y la muerte o rece con su hijo.
Reúnanse en familia con regularidad para saber cómo cada uno está sobrellevando la situación.
Ayude a su hijo a encontrar formas de simbolizar y conmemorar a la persona fallecida.
Mantenga la rutina diaria de su hijo lo más normal posible.
Preste atención a la forma de jugar de su hijo; puede ser su forma de comunicar el dolor.
No haga lo siguiente:
Forzar a un niño a mostrar su sufrimiento en público si no quiere.
Darle mensajes falsos o confusos, como «Tu abuelita está durmiendo ahora».
Decirle al niño que deje de llorar porque los demás podrían alterarse.
Intentar proteger al niño de la pérdida. Los niños captan mucho más de lo que los adultos se dan cuenta. Incluirlos en el proceso de duelo les ayudará a adaptarse y reponerse.
Reprimir sus propias lágrimas usted. Si llora delante de su hijo, le transmite el mensaje de que está bien que exprese sus sentimientos.
Convertir a su hijo en su confidente personal. Mejor acuda a otro adulto o a un grupo de apoyo.
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